martes, 7 de junio de 2011

Te seguiré esperando.

  Te seguiré esperando aunque ya no esté aquí,
aunque no quede nada de mí,
ni tan siquiera mi recuerdo.
Si me conoces un poco, sabrás,
que lo que más miedo me da es el olvido.
Te seguiré esperando aunque ya no esté aquí,
mirando siempre el maldito reloj,
que no deja de recordarme que ha pasado ya
mucho tiempo,
para tener calados hasta los huesos de esta maldita soledad que me envuelve,
me atraviesa y me duele,
que hace que ya no tenga la sospecha,
si no la certeza,
de que tenía que habértelo dicho cuando
me perdía en tu mirada,
en la mirada de esos ojos que intentaban
estar abiertos, pero nuestros besos los cerraban.
Mi herida sangra y mi llanto no encuentra consuelo,
he perdido la razón y la sin razón,
mi corazón hace ya que dejo de latir y quedo allí…
donde aún seguimos sentados, mirándonos, comiéndonos,
Sin pensar en nada y mucho menos en nadie,
(al escribir esto se ha dibujado una pequeña sonrisa en mis labios),
no he dejado,
ni dejaré que me roben ni un solo instante de los que compartí contigo…
de los que viví contigo y de los que morí contigo,
(esos fueron los mejores)…
te seguiré esperando aunque ya no esté aquí.
   Te quiero.

                                                                        Manuel Henestrosa de Antillón.

      Foto: Manuel Henestrosa de Antillón.