Ya me contaras…
Me
sonó más a una manera galante de despedirse, que a una pregunta, la cual, realmente
pudiera esperar respuesta, y si no espera respuesta, ¿para qué dársela?
Cuento
los segundos, los minutos, las horas y los días.
Cuento
cada suspiro del tiempo que se escapa sin remedio.
Cuento
la manera de no contar, de no estar, de no sentir, de no sufrir… de no vivir.
Cuento
con mi pasado para recordar.
Cuento
con unos amigos que nunca están.
Cuento
con las mentiras que me contarán.
Cuento
con las verdades que jamás se sabrán.
Cuento
con una buena amiga, la que nunca se va… (soledad).
Cuento
con un loco en mi cabeza que no me deja de atormentar.
Cuento
con la esperanza de que el mañana llegue.
Cuento
con pocos sueños y muchos pecados que perdonar.
Cuento
con la brisa que acaricia mi cara sin interrogar.
Cuento
con un alma rota que no sé arreglar.
Poco
es lo que me cuento…algún día contaré algo más.