domingo, 19 de diciembre de 2010

A UNA AMIGA.

   Sería tan difícil hacerte entender que por la sencilla razón de ser como eres, de vivir como vives, de haber pasado y sobre todo haber hecho todo lo que has hecho, ¿crees merecer o tener el derecho a abandonarlo todo?... ¿Principalmente a ti?, te equivocas, en esta ocasión no tienes la razón y mucho menos el derecho. Aunque sabemos los dos que hay cosas que no merecen la pena, que nos derrotan, que nos agobian y sobre todo que nos hacen perder la esperanza, la ilusión de vivir, de luchar para poder ser un poco felices… sólo un poco. Tú, realmente lo mereces. Pero hay que ganárselo… preguntaras, ¿aún más? Nunca es suficiente y mucho menos para este fin.
   Me gustaría dejar de dar vueltas para no llegar a ningún sitio. Me gustaría tener la fuerza suficiente para ser sincero. Me gustaría dejar de escucharos a todos dentro de mi cabeza. No quiero nada, pero tampoco quiero sufrir por ti, ni por nadie más. Quiero vivir mi vida. Vivirla por mí y para mí. No quiero más tu dolor, ni tu pena, ni tu angustia, ni tus noches sin dormir, ni esa amargura que te come por dentro porque no la quieres compartir, ni tan siquiera dejarla ver. Di de una vez que sientes, que es lo que te mata, que es lo que no te perdonas. Yo no puedo luchar por ti. Soy un guerrero, pero para otras guerras. Esta batalla está perdida desde mucho antes de comenzarla. Siento tu debilidad, tu miedo, se huele en cada palabra, en cada gesto, en cada palpitar de tu corazón.
   Libérate  de lo que te amarra al suelo, de lo que no deja volar, habla con Dios, pero no le supliques, sólo habla con Él. Intenta con tu mente que tu alma abandone tu cuerpo y viaja en el tiempo, mírate… ¿no eres tan mala, verdad?
   No esperes de nadie, lo que tú no estarías dispuesta hacer por ti.
   Todo es tan fácil como poder sentir, cerrar los ojos y dormir.

                                (Manuel Henestrosa)
                                            Foto: Manuel Henestrosa.

2 comentarios:

  1. Hubo un momento en mi vida en el que sentí la necesidad de volar.. de arrancar mis cadenas de oro y salir al mundo exterior. Y volé. Alguien me ayudó, no lo hice sola, lo habría acabado haciendo sola.. pero apareció alguien con aguja e hijo para arreglar mis alas rotas. Volé y en vez de un abismo negro encontré un mundo multicolor.
    Ahora... casi un año después... siento que debo volar otra vez... que el mundo multicolor al que sali se que me queda pequeño... mismas personas, mimas historias, mismas complicaciones, mismas vistas, mismas cadenas... Debo alzar el vuelo de nuevo... Eso he aprendido...una vez se aprende a volar... hay que aprender que existen universos infinitos (como dice la canción) por explorar...

    bss

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  2. Cris como dice Sabina...“Lo malo del amor cuando termina
    son las habitaciones ventiladas,
    el puré de reproches con sordina
    las golondrinas muertas en la almohada.

    Lo malo del después son los despojos
    que embalsaman el humo de los sueños,
    los teléfonos que hablan con los ojos,
    el sístole sin diastole ni dueño.

    Lo mas ingrato es encalar la casa,
    remendar los pecados veniales
    y condenar a la hoguera los archivos.

    Lo atroz de la pasion es cuando pasa,
    cuando al punto final de mis finales
    no le siguen dos puntos suspensivos.”
    _____________________
    Desgraciadamente casi siempre, por no decir siempre, es así… buscar y no encontrar.

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